Sus Manos

Ese precioso y radiante ser

que alrededor de un bello jardín

muy lleno de tantas flores

que con mucho amor cuida,

es mi querida madre.

Tus envejecidas manos, que

llenas están de días y noches

repletas de aflicción y pena

para obtener no solo sustento,

sino ansias para luchar en tiempos

muy difíciles y dolorosos para ella.

Esas manos, que tan colmadas

de experiencias vividas están,

al nacer fueron aquellas que desde

lo más hondo de su corazón,

entre sus brazos me acogieron

sanando con ternura heridas,

que hasta ese momento,

abiertas permanecían en ti.

Y aunque el tiempo pase

ahí estás cogiéndome bien

fuerte de la mano para no

sentirme abatida y evitar

tropezar en la misma piedra,

con tus sabios consejos; eso

lleva una sola palabra y es querer.

Foto del Día de la Madre del año 2017.