Negra rosa

 



En lo lóbrego de la negruzca
noche ahí estás, amada
rosa tiñendo con tu oscuridad
vacías calles que por ti lloran.

Con tu irresistible y insaciable
fragancia a todo nubloso
y pálido ser vistiendo tantas
venas con sus sangrientos besos.

Negra eres tú espinada 
rosa, que entre sus cortantes
espinas seductoras historias
teñidas de inmortalidad habitan.

Entre grisáceas y frías lápidas
ahí está embriagando con su dulce
perfume a mi ataúd que vacío
de toda eternidad se encuentra.

Perpetua y sombría eres tú querida
rosa, bajo lo nocturno tu rojizo
manto sobre mis afilados
y gélidos colmillos derrámalo.

Imagen extraída de Pixabay (Pixel2013)

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